El niño es capaz de reproducir las letras cuando puede invertir los dos sentidos de la curvatura, realizando trazos con giros progresivos a la derecha y a la izquierda. Se puede iniciar entonces el aprendizaje sistemático del movimiento organizado de la escritura. A partir de los 6 años el niño utiliza la estrategia ortográfica, trabajando los trazos básicos de las letras: gestual-rítmica, trazo amplio y trazo normal.
Los factores que inciden en el aprendizaje y desarrollo de la motricidad gráfica son los físico-fisiológicos, es decir, es importante trabajar la fuerza, el tono, la localización de movimientos y la velocidad del trazo, los factores psíquico-cognitivos, pues la afectividad y motricidad se integran entre sí y por último los factores socioculturales.
El dominio de la trayectoria de las palabras y la posibilidad de escribir frases depende de la coordinación de los movimientos de rotación y traslación de las coordinaciones o percepciones viso-gráficas.
No solo es importante escribir bien, sino saber comunicar escribiendo.
ARGUMENTACIÓN AL NIÑO PARA QUE SE ESFUERCE Y ENTRENE:
Niño de 2º, 4º y 6º de primaria:
Lo primero que tiene que saber el alumno es que tiene que tener en cuenta que escribir es un proceso y hay que hacerles conscientes de ello para así fomentar sus ganas de esforzarse y progresar poco a poco hasta lograr el objetivo que se han propuesto, es decir, lograr escribir de forma correcta.
Le haré saber al de 2º que es necesario mejorar la letra para que así sus compañeros puedan entenderle, y a los mayores que nuestra caligrafía funciona como carta de presentación al igual que la forma de vestir o la forma de actuar, por ello es muy importante trabajar en ello, ya que una letra personal, legible y clara nos hace pensar que el autor es ordenado y responsable con su trabajo. Todo ello se lo diré en un momento en el que estemos los dos solos para que así no se sienta cohibido en ningún momento por sus compañeros ni que sientan que se les está castigando.
También es importante que sepan que la única forma para mejorar nuestro trazado es copiando y repitiendo grafías, palabras y frases, y para fomentar el interés sobre la realización de las actividades, lo que les propondré a los tres niños de los diferentes cursos es la elaboración de un pequeño libro donde podrán ir apilando todas las actividades que hagan, en función del curso las actividades serán unas u otras, para así poder ver el avance que va realizando con el paso de los días y por lo tanto con la práctica.
Considero que es imprescindible que un niño esté motivado a la hora de aprender y mejorar.
TIPO DE MATERIALES.
El tipo de material depende del curso en el que estén, ya que no es lo mismo un niño de 2º que uno de 4º o 6º, pero como he comentado con anterioridad, se trata de un pequeño cuaderno donde podrán ver su evolución.
Niño de 2º de primaria: formas, letras y números.
El tipo de papel que utilizará el niño será medio folio o un A4, al principio con una pauta de 5 mm para que se adapte de forma correcta y poco a poco iremos disminuyendo. Es un tipo de plantilla donde podrán trabajar con soltura y sin problema de espacio ya que se trata de una cuadrícula especializada para ortografía.
Trabajarán con un lápiz negro ya que la punta es más fina y por lo tanto es menos complicado, y se trata de copiar diversas frases.
El alumno seguirá con la caligrafía con la que haya aprendido a escribir, en este caso es una letra ligada y de tipo caligráfico.
En este caso se titulará “Lo voy a conseguir”
Niño de 4º de primaria: imágenes con nombres de marcas de ropa, comida, películas.
El tipo de papel que utilizará el niño será un A4, al principio con una pauta más grande y luego iremos disminuyéndola para que la letra sea lo más correcta posible, para así en un futuro estar acostumbrado a escribir en folio, pero sin la necesidad de utilizar pautas para escribir recto.
Trabajarán con lápiz negro, pluma o bolígrafo. Al ser ya un poco más mayor, copiará cuentos cortos ya que el alumno que debe realizar este cuadernillo es un aficionado de los cuentos, pero también cabe la posibilidad de que sea el propio alumno el que elija los temas que quiere tratar.
En 4º tiene que ser una letra un poco más elaborada, y si quiere trabajar con una letra desligada debemos permitírselo siempre y cuando los caracteres sean legibles y claros, ya que a esta edad ya empiezan a tener un estilo propio de escritura. A veces podemos escoger una letra que al alumno le gusta para que se vea más motivado a la hora de copiarla.
En este caso se titulará “La de cosas que aprendo”
Niño de 6º de primaria: copiamos un texto cortito o hacemos una pequeña redacción de algo que nos guste.
El tipo de papel que utilizará el niño también será un folio con un rayado horizontal que le sirven de guía, y los temas a tratar en el pequeño libro que irá haciendo lo elegirá cada semana, para así tener una motivación mayor a la hora de hacer el ejercicio.
Trabajarán con lápiz negro o de colores, pluma o bolígrafo, aquello que les resulte más cómodo.
Al ser ya más mayor, copiará textos cortitos o a veces quizás una pequeña redacción. Lo recomendable sería que empezaran con una letra sin unir y luego la enlazaran, pero bien es cierto que a esta edad ya tienen un estilo propio de escritura, por ello debemos buscar un modelo similar a la que el niño trata de conseguir o darle varios tipos para que escoja aquella que más le guste.
En este caso se titulará “SIN LÍMITES”
PROCESO DE TRABAJO COMO RUTINA Y NO COMO DEBERES AÑADIDOS.
Es muy importante crear un entorno que integre la escritura en las actividades habituales en la escuela y diversificar las situaciones de escritura, por ello el niño podrá realizar dicha actividad cuando los demás hagan una que pueda costarle más o en algún momento del día que no le suponga un deber añadido sino como una rutina que sabe que debe hacer todos los días para así conseguir una mejora. Tiene que ser una rutina diaria a la cual se le dedica poco tiempo, unos 10 minutos aproximadamente. Deben realizarlo también en casa para no poner al niño en evidencia delante de sus compañeros y para convertir el resultado del entrenamiento en un reto personal, no escolar.
Hay que plantear tareas de escritura progresivamente complejas que permitan a los alumnos avanzar en el dominio de la escritura, y por lo tanto mejorar hasta conseguir su objetivo.
CÓMO EVALUARÉ Y REFORZARÉ EL PROCESO
Me centraré en gran medida en la grafomotricidad del alumno, ya que es una habilidad muy importante a la hora de enseñar a los niños la escritura. El leve retraso puede deberse al tono muscular, la direccionalidad izquierda-derecha, ya que hay veces que los niños no empiezan a escribir de forma correcta y por lo tanto ello puede suponerles un retraso, la coordinación visomotora y la ubicación espacial, luego, es un concepto imprescindible que hay que tener en cuenta en todo momento.
Para un buen desarrollo de la grafomotricidad y la caligrafía es importante tener en cuenta: la postura y los hábitos, el movimiento gráfico, la presión, la velocidad y el ritmo. Y a su vez habrá que tener en cuenta el control motor grueso y control motor fino y la discriminación visual.
También podremos evaluar el conocimiento de vocabulario, la cohesión y la organización, la ortografía, el contenido, la presentación y la correcta integración viso-auditiva.
Para reforzar las faltas de ortografía, podremos poner en rojo las faltas cometidas y a su vez en verde una palabra difícil bien escrita, ya que con esto reforzamos al niño, porque no es lo mismo ver una hoja llena de faltas que una hoja que también tenga verde.
A través de la observación podremos darnos cuenta de todo ello y se podrá ir reforzando el proceso poco a poco.
Al principio la evaluación será más continuada, pero poco a poco, según vayamos viendo que la letra mejora, alargaremos las evaluaciones.
BIBLIOGRAFÍA:
Siete principios básicos en que basar la enseñanza de la escritura.
Apuntes de Didáctica de la Lengua Española. Irune Labajo.
Imágenes en google.
